Antes de entrar al
estudio
- Graba tus temas durante algún directo y en los ensayos
antes de la producción. Hasta una grabación de casete sencilla, puede revelar
las partes débiles de los temas.
- Asegurarse de que todas las partes musicales y
vocalizadas estén listas. (¡Aprenderse bien los solos de guitarra y las letras
de los temas!)
- Si vas a utilizar claqueta (metrónomo), asegúrate de que
el batería lo ha ensayado y se sienta a gusto con los tiempos elegidos. Es
importantísimo que el batería logre seguir la claqueta, es la diferencia para
que suene profesional.
- Pon en tu presupuesto, las posibles demoras imprevistas.
Preparación
- Haz que el estudio sea un lugar cómodo y tranquilo. Si
no lo es, se reflejará en el producto final.
- Asegúrate de que tú y el ingeniero tengáis la misma
visión de lo que se va a hacer. Revisa los temas con él.
- ¡Utiliza cuerdas de guitarra, bajo y parches batería o
percusión nuevos!
¡Trae repuestos! (Pero recuerda que las cuerdas, debes
cambiarlas una semana antes y los parches, tres semanas antes aprox.).
- No utilices instrumentos nuevos o equipo diferente al
que sueles utilizar. Las sorpresas pueden causar problemas.
El proceso de
grabación
- Recuerda que es la emoción y el sentimiento lo que hace
la mejor canción, no la mejor interpretación técnica.
- Afina frecuentemente.
- Siempre ten en mente el enfoque de tu música. Por
ejemplo: Si es la parte vocalizada, concentra la mayoría del tiempo en ella. No
desperdicies el tiempo en cosas que no resaltan el punto central.
- Debes darte cuenta cuando terminar la sesión. Si estas
cansado, eso se escuchará.
- ¡Mantén los invitados fuera! Es tu grabación. Los
invitados te distraerán y pueden cambiar tu opinión acerca de cómo debe sonar
tu música.
- Vocalistas: ¡ No beber agua fría o con hielo! El hielo constriñe las cuerdas
vocales. El té caliente con limón y miel funciona muy bien.
La Mezcla
-A medida que se está mezclando, asegúrate de que puedas
escuchar todos los instrumentos. ¡¡¡Hay que tener una visión general de la
mezcla!!! Piensa en los temas como algo total y no sólo como instrumentos
individuales. De otra manera, todos querrán que si instrumento se escuche más
alto en la mezcla.
-Es mejor terminar la sesión cuando estás cansado, que
desperdiciar el tiempo elaborando una mala mezcla; que se tendrá que volver a
hacer de todos modos.
- Si el ingeniero escucha cinco opiniones diferentes
acerca de cómo mezclar, se cansará y tratará de terminar rápido el trabajo.