El bajo es una parte importante del sonido en vivo de cualquier banda. Junto con el bombo, será la base de la sección rítmica, pero transmitir el sonido del bajo y agregar peso al sonido general puede ser más difícil de lo que parece a primera vista. Los bajistas pueden tener una amplia gama de sonidos, desde jazz sin trastes hasta rock, funk y la avalancha sónica de Lemmy. Los estilos de interpretación (con los dedos, púa o slap) tienen sus propios problemas y en este artículo te mostraré algunas formas de lidiar con ellos.
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La forma más habitual de reforzar el bajo es con una caja DI o de "inyección directa". Estas vienen en dos formas estándar: activa y pasiva.
Las cajas pasivas son las más simples, por lo general tienen una entrada, una salida paralela para pasar al amplificador y una salida XLR para ir a la mesa de mezclas. En su interior, tienen un transformador que hace que la señal sea más adecuada para la entrada de micrófono de una mesa de mezclas. Las cajas pasivas normalmente se colocan entre el bajo y el amplificador, aunque algunas tienen una entrada que se puede utilizar después del amplificador, aceptando una señal de la salida del altavoz (raramente proporcionan una carga, así que asegúrese siempre de utilizar un altavoz también). La calidad de las cajas pasivas varía enormemente y generalmente depende del transformador que se use en su interior. Las mejores son muy buenas y resultarán increíblemente confiables, ya que hay muy pocas cosas que puedan fallar. Estas cajas no requieren ninguna alimentación externa, de ahí el nombre "pasivas".
Las cajas activas requieren alimentación, normalmente de una batería interna o mediante alimentación fantasma desde la mesa de mezclas. Realizan prácticamente la misma tarea que una caja pasiva, pero utilizan circuitos de buffer activos. Pueden ser desde cajas sencillas similares a las DI pasivas hasta dispositivos más complejos con ganancia y ecualización. Tienen la ventaja de que pueden manejar una gama más amplia de niveles que las DI pasivas, incluso los muy bajos. Una vez más, la calidad de los componentes y el diseño pueden variar drásticamente, al igual que el costo.
La variedad de cajas DI es enorme, y ahora hay disponibles cajas especializadas, a válvulas con un sonido increíblemente cálido. También hay un número cada vez mayor de cajas diseñadas para colocarse entre el amplificador y el altavoz, capturando no solo el tono del instrumento sino también del amplificador. La JDX de Radial y la PDI 09 de Palmer son opciones populares para tomar la señal después de la etapa de preamplificación.
Siempre vale la pena mirar el amplificador de bajo en sí, ya que muchos amplificadores de bajo tienen una salida DI en forma de un conector XLR en la parte posterior del amplificador. Si el amplificador de bajo contribuye al tono del bajista, esta sería mi primera opción, ya que estas salidas suelen estar después del preamplificador, que es donde se producirá la mayor parte de la coloración del amplificador. En la actualidad, esta característica es bastante común y se puede lograr un sonido excelente utilizando esta práctica salida. Algunos amplificadores tienen una opción para hacer que esta DI esté antes (pre) o después (post) de la sección del ecualizador: no hay reglas estrictas aquí, pero siempre haría que el bajista toque y conseguiría una tercera persona útil para cambiar entre los ajustes mientras escuchas desde el frente.
Entonces, ¿cuál es mejor? Una buena caja pasiva será tan buena como una caja activa y normalmente sería mi primera opción, pero si es probable que haya algún problema de nivel, como pastillas débiles, es posible que opte por una activa. Mi primer paso será mirar el equipo del bajista y preguntarle sobre su sonido. Si tiene lo que yo llamaría una configuración "limpia" (un amplificador Eden, SWR o Trace Elliot sin pedales, por ejemplo), normalmente es solo el sonido del propio bajo lo que buscaré. Una caja DI entre el bajo y el amplificador será su mejor opción para capturar el sonido lo más fielmente posible. Sin embargo, si el bajista tiene un cabezal de válvulas, como un Ampeg, Fender o similar, entonces probablemente esté usando las cualidades del amplificador para agregar al tono. Entonces analizaré la posibilidad de tomar el sonido después del amplificador.
Cada vez es más común que los bajistas utilicen pedales de efectos, y si el bajista utiliza pedales, entonces definitivamente necesitaré capturar el sonido lo más abajo posible en la cadena. Sin embargo, el problema de utilizar una caja DI justo después de una pedalera es que los efectos suelen suavizarse con los ajustes del amplificador, y sin el ecualizador en el amplificador, el sonido puede volverse burbujeante. En este caso, prestaría atención primero a la salida del amplificador. Por supuesto, vendrá después de los pedales en la cadena y capturará el sonido de los efectos, pero también obtendrá el sonido de la sección del preamplificador.
Las cajas DI generalmente se conectan directamente al bajo, con una alimentación que va desde la DI al amplificador. |
Al igual que con los guitarristas, siempre es recomendable repasar los distintos sonidos que se van a utilizar. Los saltos de nivel provocados por los pedales de distorsión o los filtros de envolvente son fenómenos habituales, por lo que conviene estar atentos a ellos durante la prueba de sonido.
Micrófonos
Notarás que todavía no se ha hecho ninguna mención de los micrófonos. Esto se debe a que, en muchas situaciones, una caja DI será la mejor opción. Para mí, varios factores determinan esta elección. Mi primera consideración siempre es el sonido, la segunda es la practicidad. Escucha el bajo y observa cómo suena: si es un sonido limpio y "sencillo", entonces una caja DI es la respuesta obvia, ya que capturará mejor el sonido del bajo, con menos coloración. Es una elección fácil y práctica. La principal ventaja de la caja DI es que solo capta el sonido del bajo; no hay derrame ni posibilidad de retroalimentación o retumbo si agregas más frecuencias bajas al bajo. Sin embargo, si tu bajista usa pedales o tiene un tono de amplificador distintivo, entonces un micrófono podría ser tu mejor opción...
La elección del micrófono depende en gran medida del sonido que se quiera capturar y de si se trata de todo el rango de frecuencias o solo una parte del mismo. No existe el micrófono "perfecto" para el bajo, ya que la elección depende en gran medida de lo que se desee conseguir. Elegir un micrófono puede ser una tarea complicada, ya que los bajos tienen un rango de frecuencias sorprendentemente amplio. Un bajo de cuatro cuerdas afinado de forma estándar comienza a 41 Hz en la cuerda E más grave en afinación estándar. Si el bajista tiene un bajo de cinco cuerdas, la frecuencia más baja será de unos 30 Hz para la B grave. El sonido también puede variar mucho según el tipo de cuerdas (si son redondas o planas, revestidas de níquel o nailon), el estilo de tocar (con los dedos, púa o slap) y el tipo de pastillas (pasivas o activas). Todos estos factores afectarán a la cantidad de información de frecuencias bajas, medias y altas que se tenga.
Modelos de micrófonos
Normalmente elijo un micrófono que me dé un sonido cercano al que estoy buscando sin tener que añadir demasiada ecualización. Si busco un sonido muy neutro, lo más cercano posible a los graves y con un buen extremo bajo extendido, buscaré primero un micrófono dinámico de diafragma grande. Tradicionalmente, esto significa un AKG D12 o D112, o posiblemente un Electro-Voice RE20. Tanto el D12 como el RE20 fueron diseñados originalmente como micrófonos vocales, pero se ocupan muy bien de los graves. El RE20 es un micrófono muy interesante, ya que no es susceptible al efecto de proximidad, por lo que usarlo cerca de un amplificador no añadirá ningún extremo bajo no deseado. Esto se debe a una característica de diseño que EV llama "D variable": múltiples entradas de cancelación de sonido a diferentes distancias de la cápsula se combinan para proporcionar una respuesta cardioide uniforme en todo el rango de frecuencia del micrófono. Esto ayuda a mantener un sonido ajustado y suave incluso a niveles altos. Por otro lado, el D12 tiene una cámara de graves para aumentar los graves, pero también es capaz de lidiar con niveles de presión sonora increíblemente altos. Los micrófonos más modernos, como el B52 de Shure, el E902 de Sennheiser y el PR40 de Heil, han desarrollado diseños especialmente para capturar fuentes de graves, ya sean bombos o bajos.
A veces me interesa más capturar una parte del carácter del sonido que el rango completo. Con algunos bajistas, el problema no son los graves, sino los medios y los agudos. Si estás intentando capturar un sonido de graves distorsionado, por ejemplo, necesitas un micrófono que mantenga ese borde áspero.
Tanto el Beyer M88 como el Shure SM57 son buenos en este aspecto. El Beyer tiene un sonido muy suave y unos graves sorprendentemente buenos. No es una opción poco común para el bombo, especialmente para un sonido jazzero suave. El Shure SM57 tiene un pico de presencia pronunciado que lo ayuda a destacarse entre otros sonidos, lo que es perfecto para el rango medio/alto de un bajo distorsionado.
¿Lo mejor de ambos?
Muy a menudo, si tengo un bajo que utiliza una amplia gama de sonidos, combino un micrófono y una caja DI. Obtengo los graves de la señal directa y los medios y agudos del micrófono. Esto puede ayudar a ofrecer lo mejor de ambos mundos. Tener dos canales también puede darte la oportunidad de favorecer un sonido sobre otro, mezclando el micrófono con la DI para agregar color al sonido. En ocasiones, suprimo la mayor parte de los graves del micrófono usando el filtro de paso alto en el canal para que solo mire los medios y agudos del sonido.
Tan pronto como combine más de una fuente en su bajo, ya sea una DI y un micrófono o dos micrófonos, el problema de la fase aparecerá. La señal directa y el micrófono a menudo pueden estar desfasados entre sí. Normalmente, esto se debe a que las dos señales miran a lados opuestos de la forma de onda. Esto dará como resultado la cancelación de frecuencias, que será particularmente notable en el extremo bajo. Si ambas señales suenan bien por sí solas, pero el sonido se vuelve más fino cuando se combinan, entonces esta suele ser la causa. Invertir la polaridad de un canal en la mesa con respecto al otro debería solucionar el problema. El canal que cambie depende de qué señal esté en fase con el sonido que proviene del escenario. Siempre comprobaré el canal de bajo en la mesa con el sonido que proviene del escenario para asegurarme de que los dos estén relativamente en fase. Normalmente me situaré en un lugar donde pueda escuchar tanto la cabina del bajo como el sistema PA a niveles iguales, y le pediré a un colega que cambie el botón de polaridad en el canal del bajo. Luego elegiré lo que suene mejor. Es importante hacer esto desde donde puedas escuchar claramente el bajo del escenario, no solo el sonido del PA en la posición de mezcla.
Las herramientas de ajuste de fase pueden resultar útiles en un bajo si se combina un micrófono y una caja DI. Little Labs IBP, Radial's Phazer y las distintas opciones de complementos, como las de Waves, te ayudarán a ajustar la fase de una señal para que se alinee con la otra. Incluso las señales ligeramente desfasadas producirán un filtrado en peine, lo que puede hacer que el sonido combinado sea delgado y carente de cuerpo. Ajustar la fase puede ayudar a minimizar los problemas y devolverle fuerza al sonido.
Comprimir para el éxito
Hay otras herramientas que pueden ayudar con el bajo, siendo la compresión la principal. Si se utiliza un compresor para restringir el rango dinámico, se puede conseguir un sonido más potente. A mí me gusta utilizar un compresor que suene sólido, como un Dbx 160 o similar. Un tiempo de ataque lento dejará pasar cualquier información transitoria inicial, pero ayudará a controlar la cola de graves más problemática del sonido. Normalmente utilizo un tiempo de retardo medio, lo suficientemente lento como para comprimir la nota, pero lo suficientemente rápido como para que se recupere antes de que se haya tocado la siguiente nota. Los estilos de bajo más dinámicos, como el slap bass, requerirán un tiempo de ataque mucho más rápido para intentar domar esos picos extremos. Como ocurre con todas estas cosas, la experimentación y la escucha juegan un papel importante: no hay reglas estrictas. También siempre enciendo y apago el compresor, por si estoy quitando o añadiendo demasiado nivel, y también para ver si realmente estoy mejorando el sonido.
Los micrófonos dinámicos de diafragma grande, como el AKG D112 (en la imagen), son una opción común para usar en amplificadores de bajos. |
Ecualización
La ecualización, como en todo, es una cuestión de gustos, y el bajo no es una excepción. Siempre intento tener como referencia el sonido del bajista en el escenario y lo controlo constantemente para asegurarme de no haberme alejado demasiado. Para mí, hay tres aspectos principales a tener en cuenta: ¿Puedo oír la línea de bajo? ¿El bajo contribuye al sonido general o distrae? ¿Funciona bien con la batería, en particular el bombo?
El primero de estos aspectos parece obvio, pero suele ser el que falta en muchos conciertos, ya que puede ser el más difícil de lograr. Conseguir claridad manteniendo el peso del bajo es un desafío. Por lo general, tiene que ver con la claridad en el rango medio, encontrar la frecuencia correcta para realzar y, posiblemente, cortar algunos medios bajos para ayudar a liberar algo de espacio. Al mismo tiempo que se agregan medios altos, es importante recordar que el bajo generalmente proporciona la mayoría de los graves en la mayoría de las bandas, por lo que hay que mantener el peso del sonido, lo que a veces puede ser un acto de equilibrio complicado.
En contexto
Cuando hago pruebas de sonido, siempre me gusta que el baterista y el bajista toquen juntos para poder escuchar cómo interactúa la sección rítmica. Los músicos siempre tocan mejor cuando tocan al unísono con algo, y verás que esto te dará una idea mucho mejor de cómo suena el bajo y también de cómo sonará la batería.
Al combinar las señales de un micrófono y un DI, una herramienta de alineación de fase como Phazer de Radial puede ayudarle a asegurarse de que los dos canales se sumen de forma constructiva. |
Lo fundamental con el bajo es no olvidar su papel en la banda y trabajar con él en contexto. Un buen sonido de bajo sustentará tu mezcla y la hará potente y dinámica, pero es importante mantenerlo en el nivel adecuado y en equilibrio con los demás miembros de la banda. Es fundamental asegurarte de que lo que haces como ingeniero esté en contexto con lo que sale del escenario. ¡Pero escucha y experimenta en todo momento!
Consejos profesionales
Hablamos con algunos de los mejores ingenieros de sonido en vivo profesionales para descubrir cómo tratan los bajos.
Marc Carrolan (Muse): “En el bajo, suelo microfonear el centro del cono. Siempre me parece más sólido. Con Muse llevamos un tiempo utilizando un Beyer M88 en los bajos limpios y unos Shure SM57 en las cajas distorsionadas, y la combinación funciona de verdad. La sugerencia del M88 vino de [el bajista de Muse] Chris Wolstenholme, y al principio tenía mis dudas, ¡pero por supuesto tenía razón! A veces me gusta utilizar condensadores de diafragma pequeño en el bajo, ya que me parecen muy estables tonalmente, especialmente si quiero utilizar una señal de micrófono pura en lugar de mezclarla con una DI”.
Arnie Annables (Motorhead): “Todos los stacks de guitarra y bajo están en vivo en el escenario y suenan muy fuerte. En el stack de bajos hay un Shure Beta 52, que está oculto para el bajista ya que solo quiere ver un SM57. El Shure SM57 en el stack principal está alineado con un Radial Phazer al Beta 52. Nunca debo usar una DI en el bajo, dice el jefe. Lemmy no quiere escuchar un montón de subwoofers”.
Si tu bajista usa muchos pedales, es importante que la señal DI se conecte después del último pedal de la cadena. También debes verificar la configuración de ese pedal para evitar saltos repentinos de nivel cuando se activa uno de ellos.
Si tu bajista usa muchos pedales, es importante que la señal DI se conecte después del último pedal de la cadena. También debes verificar la configuración de ese pedal para evitar saltos repentinos de nivel cuando se activa uno de ellos.
Ray Furze (Pixies, Chris Rea): “La mayoría de los bajistas con los que me encuentro han trabajado en su sonido durante mucho tiempo y necesitan muy pocos cambios por mi parte. Rara vez uso compresores en los bajos estos días. Intento descubrir cómo quieren sonar; no a todos les gusta que haya grandes cantidades de subgraves haciendo vibrar el escenario. [El bajista de Pixies] Kim Deal, en particular, odiaba escuchar subgraves”.
Siempre animo a los ingenieros a que salgan de detrás de la mesa y deambulen por la sala cuando escuchen el sistema de sonido, especialmente cuando estén haciendo pruebas de sonido de bajo y batería. Muy a menudo, especialmente en clubes pequeños, la posición de mezcla estará en una esquina cerca de la pared del fondo. El sonido en la mesa de mezclas puede ser muy diferente del que se escucha desde donde se encuentra la mayoría de la audiencia. Al bajo, como a un asaltante, le gusta rondar por las esquinas y robarte tu percepción clara, por lo que tienes que ponerte en el medio de la sala y deambular para tener una idea más clara de lo que está sucediendo en el lugar.
Jon Burton - www.soundonsound.com