Aunque hay muy pocas reglas fijas, hay algunas guías para resolver los problemas acústicos. Este proceso requiere dedicarle tiempo a escuchar nuestro local. Hagan de sus oídos su propio analizador.
COLOCACIÓN DE LOS MONITORES
Es muy importante familiarizarse por completo con los monitores que va a usar. Revisa con detenimiento las especificaciones de la respuesta de frecuencia suministrada por el fabricante. Sin embargo, recordar que estas medidas son hechas en cámaras anecóicas. Al colocar los monitores en un recinto con paredes, la respuesta de frecuencia de los bajos cambiará de manera significativa. La respuesta en las bajas frecuencias aumentará más aún cuando coloques el monitor contra la pared (media carga) o en una esquina (un cuarto de carga). Las gráficas de respuesta son útiles para conocer las limitaciones del monitor. Por ejemplo, el Yamaha NS10 corta dramáticamente a partir de los 125Hz así que no tiene que preocuparse demasiado por los problemas en las bajas frecuencias al colocar este monitor. También hay que poner mucho cuidado a la colocación de los monitores para obtener una alineación de fase adecuada. Hay que asegurarse que el punto de intersección donde ocurre este alineamiento ocurra al nivel de los oídos. En algunos monitores, está directamente alineado con los tweeters. Para otros, es un punto medio entre el woofer y el tweeter. Esto depende del diseño del monitor, así que hay que verificar los manuales y referencias del fabricante.
Antes de pensar en tratamientos acústicos, hay que optimizar la posición de los monitores en tu estudio. El primer paso es el determinar contra qué pared deben colocarse los monitores. Si su recinto es cuadrado, no importa cual de ellos escoja. Si su recinto es rectangular, dependerá de las dimensiones. Para averiguar cuál pared utilizar, colocar un monitor en cada pared, aproximadamente la misma posición, a una altura ideal para escuchar. Enviar una señal mono a cada uno de los monitores, primero a uno y luego a otro, y escuchar con atención. Deberás poder sentir cuál de los monitores da una respuesta más plana en los bajos. Un mayor contenido en bajos no es necesariamente bueno. Tratar de escuchar donde los bajos son más homogéneos y están más conectados con las frecuencias medias e inferiores.
Las figuras 1 y 2 muestran ejemplos de lo diferentes que pueden ser las respuestas de frecuencia de dos monitores colocados en dos paredes distintas de un cuarto de 9 x 11 pies.
La palabra clave sería "simetría". Si solo te es posible hacer una cosa correcta, hay que organizar su recinto lo más simétrico posible. ¿Qué significa esto? Los monitores deben estar colocados simétricamente en el cuarto o tendrán diferentes respuestas de frecuencia. Esto significa que tu música sonará diferente en el monitor izquierdo que en el derecho, su imagen central estará descentrada y su producto no podrá ser reproducido adecuadamente en mono. No creáis en el rumor que asegura que los monitores de campo cercano no se ven afectados por la acústica del recinto. Eso va contra las leyes de la física. Así que a utilizar el metro de medir y asegurarse que los monitores izquierdo y derecho están equidistantes de cada una de las paredes laterales y la pared frontal.
¿Por qué es esto necesario? Se debe al hecho que por debajo de los 200Hz, sus monitores son casi omnidireccionales. Las señales que rebotan de las paredes laterales y frontal se mezclarán con la señal directa proveniente del monitor. Esta señal retardada filtrará la señal (comb filtering). El retardo de tiempo, y por ende la frecuencia de la interacción será dependiente de la distancia que existe entre los monitores y las paredes. Si el monitor izquierdo se encuentra a una distancia diferente de las paredes que el monitor derecho, las cancelaciones ocurrirán a diferentes frecuencias. Esto también es cierto para las reflexiones de primer orden por encima de los 400Hz, de las cuales hablaré más adelante.
Las figuras 3 y 4 ilustran lo que pasa a las frecuencias bajas cuando los monitores son colocados de manera asimétrica en un recinto.
En este punto, necesita determinar qué tan lejos de la pared frontal deberá colocar los monitores. Esto requerirá más pruebas con sus oídos. Escuche ambos monitores en estéreo. Mueva los monitores de a seis pulgadas cada vez, ya sea para adelante o para atrás. En un cuarto pequeño estos incrementos pueden significar una gran diferencia. De nuevo, tienes que escuchar donde la respuesta de frecuencia es más homogénea. Aunque haya poco espacio, haz lo posible.
Las figuras 5 y 6 muestran el por qué los monitores deben colocarse detrás del panel de medidores de la consola. Para obtener una buena imagen estéreo, hay que sentarse de manera que la posición de la cabeza y sus monitores formen un triángulo equilátero.
Para optimizar la posición de mezcla (conocida como el "sweet spot"), mida el ancho de su cuarto y coloque una base de micrófono en el centro, dos o tres pies detrás del descansa brazos de la consola. El ancho de su consola o espacio de trabajo determinará con exactitud que tan atrás debe sentarse. La distancia medida de tweeter a tweeter debe ser igual a la distancia de cada uno de los tweeters a la base del micrófono. esta distancia dependerá del tamaño del cuarto y el ancho de la consola.
Recordad que el típico monitor pequeño está diseñado para ser utilizado a una distancia no mayor de seis pies. A medida que se mueva los monitores, tener en cuenta que cada monitor debe estar a la misma distancia de las paredes laterales.
Las puertas son un factor importante en la sala. La respuesta de frecuencia de las bajas frecuencias puede variar radicalmente dependiendo si la puerta está cerrada o abierta. A menudo, las puertas están colocadas en las esquinas y pueden tener un efecto más pronunciado sobre un monitor que sobre el otro. Esto debe evitarse, por lo que yo recomiendo mantener las puertas cerradas. Sin embargo se deberá llevar a cabo más pruebas y escuchar para obtener una solución adecuada.
ACÚSTICA
Con los monitores en el lugar correcto, es hora de mirar las primeras reflexiones. Estas son las que llegan a la posición de mezcla en los primeros 19ms después de la señal directa. (Estas señales habrán recorrido unos 21.5 pies más que la distancia entre el monitor y la posición de mezcla.) El cerebro no puede diferenciar entre la señal directa y la señal reflejada en este pequeño espacio. El resultado es que la señal reflejada se suma a la señal directa, igual que en una linea de retardos. Desde luego, esto causa que la señal sea filtrada (comb filtering) y por lo tanto, que ocurran cancelaciones en la respuesta de frecuencia. Esto se traduce en problemas de imagen y de fase. Nada bueno.
Identificar esas reflexiones es algo fácil. Por encima de los 400Hz, el sonido se comporta de manera similar a la luz. Dígale a un amigo que se siente en la posición de mezcla, y coloque un espejo (2x2) sobre la pared izquierda. Mueva el espejo sobre la pared hasta que su amigo vea reflejado primero el monitor izquierdo y luego el derecho. Haz lo mismo con la pared derecha, el techo y la pared posterior, y marque los puntos donde su amigo ve los monitores para poder tratar estás áreas. Si organizas la sala de manera apropiada, los tratamientos necesarios para la pared izquierda y la derecha serán bastante simétricos.
Ahora mida la distancia del paso de la señal directa del monitor a la posición de mezcla. Luego mida la distancia del monitor a cada uno de los puntos marcados y de vuelta a la posición de mezcla (paso de la señal reflejada). Reste el valor obtenido para el paso de la señal directa del valor obtenido para el paso de la señal reflejada. Si es menos de 22 pies, debes tratar acústicamente esas áreas.
Existen dos opciones para tratar esas reflexiones: absorción y difusión. Para las paredes laterales y el techo me gusta utilizar absorción. He aquí el por qué: un material absorbente retira la energía, pero un difusor la reparte en el espacio y el tiempo. Esto quiere decir que el difusor crea muchas pequeñas reflexiones de menor energía.
Para las paredes laterales y el techo, una solución barata sería paneles que venden hoy en día en cualquier almacén musical. Corte el panel para que se ajuste a las marcas que se hicieron. Normalmente se deja que sea más grande que el área de reflexión. No cubrir todas las paredes en su totalidad pues disminuirán el tiempo de reverberación de las frecuencias altas. Solo tratar las áreas donde hay problemas. No hay nada peor que el sonido pesado de un cuarto sobre-tratado.
Si tus monitores están muy cerca a la pared frontal, tratar de colocar sobre la pared y entre los monitores difusores. En ocasiones, esto le dará algo más de imagen frete-atrás, es decir profundidad, ya que rompe con esas solidas reflexiones. Recuerde que la mayoría de los monitores pequeños están diseñados para ser utilizados en el campo libre.
Una vez tratadas las paredes y el techo, escuchar algo de música que conozcas bien. Escucha en las esquinas para ver qué tanto aumentan los bajos. Si el aumento es considerable, sería bueno instalar trampas para bajos en las esquinas. Este es un tipo de trampa que cubre un rango de frecuencias amplias y que posiblemente homogeneizará la respuesta de los bajos en la sala.
Si después de aplicar estos tratamientos crees que su sala es muy reverberante, es posible que sea necesario aplicar más tratamiento. por ejemplo se puede aplicar una capa de menos espesor que las utilizadas antes.
Estos principios te ayudarán a mejorar tu ambiente de trabajo. Aún mejor, el hecho de tener que escuchar de manera crítica durante el proceso mejorará tus facultades como Ingeniero y te ayudarán a entender la personalidad de tu estudio.
Bob Hodas